Hace dos siglos, Simón Bolívar escribió: "Los Estados Unidos parecen condenados por la providencia a plagar de miserias a América con el pretexto de la "libertad".
En la América Latina de hoy, y sobre todo en el Perú, el Tío Sam ha sabido usar la acusación de "dictadura" para desprestigiar a cuantas corrientes populares emergen. "Dictadorzuelo" llamó al soldado patriota y revolucionario Hugo Chávez.
Desde Pedro Pablo Kuczynski, quien creó el Grupo de Lima, obedeciendo a un plan continental del Departamento de Estado, buscan derrotan el Gobierno legítimo de Nicolás Maduro. Y apoderarse de las reservas más ricas de petróleo, que están en la cuenta del Orinoco, Venezuela.
El poder mediático de prensa, radio y televisión ha enfocado su juego al "dictador" Maduro. Pero guarda silencio estricto sobre el caso del periodista de Arabia Saudita, Yamal Jashogyi, asesinado por el gobernante dictador de ese país.
Hemos visto, además, a Luis Gonzales Posada atacar a acusación que pesa sobre este dirigente aprista, de ser agente de la CIA.
Hay, por cierto, un vínculo entre la cúspide aprista y la cumbre política de Venezuela. El Apra y Acción Democrática de Venezuela son partidos hermanos. Comenzaron como antiimperialistas y hoy van dejando huellan en la historia como ladrones del fisco y asesinos de izquierdistas.
El Apra y la opositora Acción Democrática en Venezuela comparten el criterio de que Estados Unidos debe intervenir en Venezuela. No olvidemos que Víctor Raúl Haya de la Torre elaboró en los años cuarenta del siglo pasado la teoría de la acción colectiva en los países americanos contra gobiernos del Caribe y Centroamérica, un disfraz para encubrir la intervención armada del Gobierno estadounidense.
Colectiva o individual, la invasión armada contra Venezuela no sería un desfile triunfal. Más de una vez hemos se ñalado que Maduro cuenta con el apoyo de todas las fuerzas armadas venezolanas, la marina, el ejército, la policía, y de las milicias armadas y entrenadas bolivarianas, como lo informa la prensa internacional. El jueves, las Fuerzas Armadas reiteraron su posición:
"La institución castrense rechaza acciones ilegales con las que se persigue instalar un gobierno paralelo en Venezuela, así como los alevosos llamados de algunos sectores para apartarla del sendero democrático".
"Rechazamos del modo más enérgico posible los groseros actos de injerencismo llevados a cabo por gobiernos extranjeros, los cuales consideramos irrespetuosos del derecho internacional y del principio de autodeterminación de los pueblos, siendo además ofensivos a la dignidad de los venezolanos".
"Las Fuerza Armada Nacional Bolivariana va a garantizar la paz ciudadana y el correcto funcionamiento de las instituciones de Estado y no tolerará hechos vandálicos o terroristas por parte de grupos que promueven la violencia como perverso mecanismo para alcanzar sus fines".