El 22 de junio es un día especial en el calendario litúrgico católico, ya que se conmemora a varios santos y mártires, siendo el más destacado Santo Tomás Moro. Un hombre de profunda fe, valentía y erudición, cuya vida y legado continúan inspirando a millones de personas en todo el mundo.
Santo Tomás Moro: Caballero, lord canciller y mártir
Nacido el 7 de febrero de 1477 en Londres, Santo Tomás Moro fue un erudito excepcional desde su juventud. Educado en las artes y las leyes, destacó por su elocuencia, inteligencia y devoción. A lo largo de su vida, Moro desempeñó roles importantes en la corte y en el Parlamento inglés, siendo reconocido por su integridad y justicia.
Sin embargo, su legado trasciende los logros mundanos, ya que Moro fue un fiel defensor de su fe católica en tiempos turbulentos. Se negó a ceder ante las presiones del rey Enrique VIII para renunciar a sus convicciones religiosas y aceptar el divorcio del monarca. Por su firmeza en la fe, Moro fue encarcelado y finalmente ejecutado el 6 de julio de 1535.
Otros santos celebrados este día
Además de Santo Tomás Moro, el 22 de junio se celebra la vida y santidad de otros venerables individuos:
- San Albano de Verulamio: Mártir inglés del siglo III, conocido por su valentía y testimonio de fe.
- Santa Consorcia: Virgen y mártir que dedicó su vida al servicio de Dios y al prójimo.
- San Eusebio de Samosata: Obispo y mártir cristiano del siglo IV, reconocido por su defensa de la ortodoxia en tiempos de controversia.
- San Flavio Clemente: Mártir romano venerado por su valentía y firmeza en la fe en medio de la persecución.
- San Juan Fisher: Obispo y mártir inglés, conocido por su lealtad a la Iglesia católica durante la Reforma.
- San Nicetas de Remesiana: Obispo y evangelizador que dedicó su vida a propagar el Evangelio en Europa Oriental.
- San Paulino de Nola: Santo italiano del siglo V, famoso por su generosidad y obras de caridad.
- Beato Inocencio V Papa: Pontífice que guió a la Iglesia en tiempos difíciles, promoviendo la paz y la unidad entre los fieles.
En este día, recordamos con gratitud y reverencia la vida y el legado de estos santos y mártires, cuyos ejemplos de fe, sacrificio y servicio continúan inspirando a las generaciones venideras.
El santoral del 22 de junio nos invita a reflexionar sobre el valor de nuestra propia fe y el compromiso con nuestros principios, incluso en medio de las adversidades. Que la vida y el testimonio de estos santos nos inspiren a vivir con integridad y devoción, siguiendo siempre el camino de la verdad y el amor.
Desde Santo Tomás Moro hasta los demás santos conmemorados este día, su legado perdura como una luz en la oscuridad, recordándonos que, incluso en los momentos más difíciles, la fe y la valentía pueden prevalecer.
¿Qué es el santoral?
El santoral es el conjunto de personas veneradas en la Iglesia Católica como santos o beatos en una fecha del calendario determinada. Los santos son personas que han vivido una vida ejemplar de fe y caridad, y que han sido reconocidas como tales por la Iglesia. Los beatos son personas que han dado muestras de santidad, pero que aún no han sido canonizadas.
¿Cómo se convierten los santos?
El proceso de canonización es un proceso largo y complejo que puede durar siglos. El primer paso es la investigación del candidato a santo, para comprobar que su vida fue realmente ejemplar y que murió en estado de gracia. Si la investigación es positiva, el candidato es declarado venerable.
El siguiente paso es la beatificación, que es la declaración oficial de que el candidato es beato. Para ello, se necesita un milagro atribuido a la intercesión del candidato. Si el milagro es reconocido por la Iglesia, el candidato es beatificado.
El último paso es la canonización, que es la declaración oficial de que el candidato es santo. Para ello, se necesitan dos milagros atribuidos a la intercesión del candidato. Si los milagros son reconocidos por la Iglesia, el candidato es canonizado.