Este 7 de enero, la Iglesia Católica conmemora a San Raimundo de Peñafort, un presbítero destacado de la Orden de Predicadores, conocido por su profundo conocimiento del derecho canónico y su labor en la penitencia y evangelización.
Nacido alrededor de 1175 en Peñafort, España, San Raimundo mostró temprano una extraordinaria inteligencia y se convirtió en profesor de filosofía en Barcelona a los 20 años. Más tarde, estudió derecho civil y canónico en la Universidad de Bolonia, donde se destacó como profesor y se doctoró.
A los 40 años, ingresó en la Orden de Predicadores y se dedicó a la penitencia y la instrucción moral. Su trabajo más destacado fue la "Summa de casibus paenitentialibus", un tratado sobre la penitencia que ha sido invaluable para confesores y moralistas.
Además de su labor como teólogo y canonista, San Raimundo fue reconocido por su labor evangelizadora y su dedicación a los necesitados. Fundó conventos, promovió la conversión de musulmanes y judíos, y defendió la fe contra herejías.
Un episodio célebre en su vida fue su milagrosa travesía desde Mallorca a Barcelona sobre una túnica extendida sobre las olas, demostrando su confianza en la providencia divina.
San Raimundo murió en Barcelona el 6 de enero de 1275, a los 100 años de edad, y sus restos reposan en la Catedral de Barcelona. Fue canonizado en 1601, y su legado perdura como ejemplo de sabiduría, humildad y servicio a los demás.
Además de San Raimundo de Peñafort, también se celebra la fiesta de otros santos y mártires en este día:
- San Alderico
- San Canuto Lavard
- San Ciro
- San Crispino Obispo
- San José Tuân
- San Luciano Mártir
- San Polieuto
- San Tilón
- San Valentín obispo de Retia
- San Valentiniano
- Beato Ambrosio Fernández
- Beata María Teresa Haze
- Beato Mateo Guimerá
¿Qué es el santoral?
El santoral es el conjunto de personas veneradas en la Iglesia Católica como santos o beatos en una fecha del calendario determinada. Los santos son personas que han vivido una vida ejemplar de fe y caridad, y que han sido reconocidas como tales por la Iglesia. Los beatos son personas que han dado muestras de santidad, pero que aún no han sido canonizadas.
¿Cómo se convierten los santos?
El proceso de canonización es un proceso largo y complejo que puede durar siglos. El primer paso es la investigación del candidato a santo, para comprobar que su vida fue realmente ejemplar y que murió en estado de gracia. Si la investigación es positiva, el candidato es declarado venerable.
El siguiente paso es la beatificación, que es la declaración oficial de que el candidato es beato. Para ello, se necesita un milagro atribuido a la intercesión del candidato. Si el milagro es reconocido por la Iglesia, el candidato es beatificado.
El último paso es la canonización, que es la declaración oficial de que el candidato es santo. Para ello, se necesitan dos milagros atribuidos a la intercesión del candidato. Si los milagros son reconocidos por la Iglesia, el candidato es canonizado.
