Aquí una pequeña lista de algunos dispositivos que pueden prevenir enfermedades y que ya están en el mercado.
- Pañales inteligentes que analizan detalladamente los excrementos de sus bebés.
- Lentes de contacto que analizan la cantidad de glucosa que contienen las lágrimas.
- Pulseras inteligentes: miden los latidos del corazón, la calidad del sueño y el número de pasos que damos por día.
- Pulseras biométricas: miden también el ritmo cardiaco, la transpiración, la duración del coito y del orgasmo y las calorías que se queman.
La medicina del Siglo XX tenía como objetivo curar las enfermedades y promover la prevención de las mismas. La medicina del Siglo XXI tiene por finalidad, además de curar y prevenir, mejorar la calidad de vida y un aprovechamiento más adecuado de las potencialidades que posee nuestro cerebro.
En ese campo los descubrimientos son asombrosos y podríamos arriesgarnos a afirmar que un nuevo ser humano, esperemos que mejor y más responsable que el actual, está en camino.
Con la ingeniería genética todo o casi todo es posible. Lo demuestran los conejos fosforescentes que son parte de un experimento de manipulación genética. Sus embriones fueron inyectados “con una proteína fluorescente de ADN de medusas dándoles el gen resplandeciente que los hace verdes bajo una luz negra.”
Esperemos que el espíritu de investigación estrictamente científica prevalezca sobre el instinto comercial y los avances que se logren en el futuro estén realmente destinados a mejorar la calidad de vida de los seres humanos y la protección de la Natural.