El oasis de alegrías de dos naciones se basa en el resultado de un encuentro por eliminatorias que se dará a cabo este 3 de junio en el Estadio Nacional. Una vez más el fútbol pasará a enmascarar un desastre causado por egos y pandemia. Colombia llega con una mochila llena de protestas y estragos por la tercera ola de la covid-19, mientras Perú protege en casa la poca dignidad que le queda a la mal usada camiseta blanquirroja.
Es perceptible cuál es el país con peores síntomas en la actualidad, pero el otro no se salva de un futuro dolor de cabeza. Para nuestra selección, los tres puntos servirán como ancla momentánea en la competencia para clasificar al Mundial Qatar 2022. Algo muy necesario luego de seis fechas arrastrados por una corriente llena de fracasos.
El historial Perú-Colombia, sin embargo, no promete demasiado para la selección nacional, que, para agregar más suspenso, aún no logra ni rasguñar al cuadro "cafetero", a pesar de tener un "tigre" en el banco técnico. Ojalá algunos jugadores logren ponerse la verdadera camiseta y puedan lavar la franja de la blanquirroja.
Son 36 los compromisos oficiales en los que se han enfrentado ambas selecciones, los cuales se dividen en 13 triunfos "cafeteros", 10 conquistas "incaicas" y 13 empates. A primera vista la ventaja no es mucha, pero la realidad es que, de las 10 victorias peruanas, siete han sido en Copas Américas y apenas tres por eliminatorias mundialistas.
Los "parceros" han logrado profanar en más de una oportunidad el Estadio nacional, llevándose los tres puntos como si solo vinieran a recoger lo que ya era suyo. Apenas una vez hemos logrado utilizar la localía a nuestro favor, siendo el empate nuestro fiel escudero. Pero, aunque las estadísticas digan que ya empezamos perdiendo el partido que se jugará recién este 3 de junio, en el fútbol lo ilógico es lo cotidiano.
En la actual "era Gareca" el conjunto incaico aún no ha logrado proclamarse vencedor, como si solo pudiera elegir entre dos males: el empate o la derrota, ¡qué premonitorio! Son cuatro los partidos que el "Tigre" dirigió frente a la "tricolor", y aunque en ninguno de los cruces nos pasaron por encima, resulta decepcionante no lograr el triunfo.
Colombia
Lleno de jugadores top, la selección "cafetera" pinta como uno de los futuros clasificados al Mundial Qatar 2022, aunque recién lleve cuatro puntos en seis fechas jugadas. El cerebro detrás de este puesto en la tabla, fue Carlos Queiroz, quien, luego de un acuerdo con la Federación de Fútbol de Colombia, rescindió contrato, pues los grandes fracasos con Uruguay (3-0) y Ecuador (6-1) lapidaron su proyecto de selección con olor a café.
Aunque quedarse sin entrenador a media competencia internacional sería un peso muy fuerte que suele arrastra al fracaso, el remplazante de Queiroz es algo así como el "Rey Midas colombiano". Reinaldo Rueda campeón de la Libertadores al mando del Atlético Nacional de Medellín y técnico mundialista con Honduras, es el actual estratega "cafetero", toda una figura en el banco.
Rueda llega luego de un pasado turbulento con la Selección Chilena, pero con la experiencia necesaria para hacer "magia" en el cuadro "parcero". Así la principal falencia colombiana no vendría por parte del talento o la estrategia, sino, por parte psicológica, pues la situación social del país "cafetero" debe ser la peor en el continente a causa de las decisiones y reformas de su presidente Iván Duque.
Perú
Por otra parte, el conjunto blanquirrojo viene pasando por una grieta futbolística a causa de la inexistente solidez defensiva del equipo y las lesiones de futbolistas claves. A pesar de haber conseguido nuevos convocados que han parchado estos vacíos en el esquema incaico, Gareca no ha logrado conseguir los tres puntos que logren ser el trampolín de ascenso en la tabla.
Parece que en el sombrero del "Tigre" ya se acabaron los conejos, pues la ilusionante campaña pasada ya quedó en solo como un bonito recuerdo. Aunque en el presente muchos de nuestros jugadores hayan dado un salto de calidad, los resultados han caído en picada, tal vez ya es hora de variar el once inicial y no aferrarnos a un solo grupo como una argolla al dedo.
Sin embargo, el golpe no solo sería futbolístico en la selección nacional, pues estas últimas semanas, algunas de las "estrellas" blanquirrojas parecen haberse estrellado contra la pared tras haber brindado una innecesaria intervención política. Quizá unos meses antes, con una vacancia de por medio, este tipo de esfuerzos hubiera sido mejor que solo estados de Instagram. "Zapatero, a sus zapatos".
La séptima fecha de las eliminatorias regresa y no precisamente en el mejor momento para ambos países, incluso, uno de los dos podría estar a punto de caer en Unidad de Cuidados Intensivos. Esta vez los tres puntos parecen no ser tan importantes para dos selecciones que cargan su respectiva caja de Pandora. Por un lado, el intento de represión de un pueblo que grita, a garganta desgarrada, ser escuchado, mientras por el otro lado, una segunda vuelta electoral que pinta más a "Guerra fría".