En un año crítico en muchos sentidos, parecería que la inventiva y el empeño humanos se han reforzado más que nunca. Así es que, tras una caída del 80% del tráfico aéreo internacional, en comparación con julio de 2019, directivos y trabajadores de aerolíneas y aeropuertos siguen haciendo un gran trabajo.
“Vamos a salir de esta crisis y volver a conectar el mundo”, afirma Alexandre de Juniac, el director de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA). Pero, ¿qué es lo que se está haciendo y cómo es viajar en avión en tiempos de pandemia? Aquí, un repaso de las novedades.
¿Qué medidas de seguridad están aplicando las aerolíneas?
Muchas cosas han cambiado en materia de viajes y la experiencia de estar a bordo de un avión no es la excepción. La mascarilla forma parte del nuevo paisaje “normal” en todos los vuelos, pero hay otras medidas que continúan pareciendo algo extrañas. Conocerlas de antemano puede ayudar a aliviar el impacto de viajar cuando abran las fronteras.
Muchos vuelos internacionales optaron por respetar el distanciamiento social, haciendo que sus pasajeros ocupen un asiento de por medio. De esta forma, los vuelos quedaron casi a la mitad de su capacidad normal, lo cual también tuvo su repercusión en los costos de los pasajes. Algunas aerolíneas no están aplicando esta medida, por no considerarla efectiva en prevenir el contagio.
Por otro lado, las aeronaves se limpian con más frecuencia y ya no se realizan ventas en efectivo a bordo, por lo cual es obligatorio pagar con tarjeta. No obstante, muchas aerolíneas también han eliminado el servicio de comidas y bebidas. Tampoco, se puede hacer fila para usar el baño a bordo; en cambio, hay que presionar el botón de asistencia y esperar, sentados, el propio turno.
Todo esto se agrega a los protocolos aeroportuarios: prohibir el ingreso a toda persona que no posea tarjeta de embarque, controlar la temperatura de los pasajeros y respetar el distanciamiento. Por otro lado, algunas aerolíneas recomiendan realizar el check-in y la facturación del equipaje de manera virtual.
Un nuevo paisaje a bordo
Por otro lado, se está trabajando incansablemente para lograr más avances en materia de seguridad. Empresas especializadas en la fabricación de asientos de avión (como Recaro) ya están diseñando elementos de seguridad que podrían transformar las cabinas de avión. Con todo esto, es posible que la realidad de los futuros vuelos sea muy diferente a lo que se conoce.
Entre los cambios que se evalúan, está la posibilidad de modificar los asientos, de manera que incluyan divisores o “barreras” de tela o una separación más amplia entre cada reposacabezas. Esto permitiría que los asientos puedan ocuparse totalmente, al tiempo que se protege la salud de los pasajeros, con elementos relativamente livianos.
También existe la posibilidad de que se agregue un nuevo recubrimiento de desinfectante en las superficies de los asientos. Las medidas aún no están implementadas, pero traen esperanza a los viajeros, mientras se espera el desarrollo de una vacuna.