En medio de la guerra comercial que tiene como protagonistas a las principales economías del planeta, Donald Trump atacó el sábado al grupo Apple a producir sus dispositivos en los Estados Unidos en lugar de hacerlo en China.
"Los precios (de los productos) Apple podrían aumentar debido a los enormes aranceles que tal vez impondremos a China", dijo el presidente de Estados Unidos en su cuenta oficial en Twitter, tras amenazar el viernes con gravar todas las importaciones desde China, acusando al gigante oriental de prácticas comerciales "desleales".
"Pero hay una solución fácil", agregó antes de sugerir al gigante de la electrónica de California: "Hagan sus productos en los Estados Unidos en lugar de China. Comiencen a construir nuevas plantas lo antes posible. ¡Emocionante!".
La compañía con con sede en Cupertino, California, muy dependiente del gigante asiático, donde hizo la mayoría de sus dispositivos, podría terminar involucrado en el fuego cruzado de las dos potencias.
Su jefe Tim Cook reconoció recientemente que los aranceles impuestos a China por la administración Trump son como "impuestos al consumidor".
Entre julio y agosto, 50.000 millones de dólares en bienes chinos fueron gravados en los Estados Unidos. Pekín respondió de manera idéntica y advirtió que aún podría apuntar a productos estadounidenses por un valor de 60.000 millones de dólares.
Pero eso no es todo, Donald Trump tendría en mente ir por la tributación adicional de 200.000 millones de dólares de bienes chinos. Esta nueva medida "podría aplicarse muy pronto, depende de lo que pase con ellos", dijo el viernes.
Con información de AFP
