Real Madrid y Juventus, ambos equipos eliminados en los octavos de final de la Champions League. Cada uno a su estilo y manera, intentaban remontar un marcador que les era poco favorable para levantar la ansiada orejona. Los ‘Galácticos’, dirigidos por el histórico francés, Zinedine Zidane, hicieron hasta lo imposible por sobreponerse a este marcador adverso, pero no lo lograron.
Cuenta el apólogo, que una vez, un futbolista llamado Cristiano Ronaldo Dos Santos Aveiro formó parte de sus filas, convirtiendo a este club en una máquina para ganar títulos, derrotando a los planteles deportivos más fuertes del viejo continente haciéndolos ver como un grupo de deportistas neófitos que inician en el balompié. Desde que era pequeño, siempre buscaba ser un ganador y sobre salir ante todos. Marcar la diferencia y ser único era su propósito, y cada vez que las cosas no resultaban a su favor se enojaba mucho. El astro originario de Madeira-Portugal, lo ha ganado todo, y es que, a pesar de atravesar por muchas adversidades durante su niñez y adolescencia, nunca se rindió hasta convertirse en uno de los mejores jugadores del mundo. Su intención por superarse cada día, lo llevaba a tener rutinas complicadas y bastante intensas, solía y suele ser muy riguroso con sus métodos de entrenamiento, ya que ese era el único camino que podía trazar para marcar un hito en el fútbol. Grandes clubes como el Inter de Milán, Manchester City y Barcelona fijaron su vista en él, pero ‘El Comandante’, apodo atribuido en el 2013 por el ex presidente de la FIFA, Joseph Blatter, ya tenía una meta y sabía que el Real Madrid era su próximo destino.
El ariete portugués en la ‘Casa Blanca’ lo ha conquistado todo, su registro de goles ha sido monstruoso, fue tan eficaz que se ganó el puesto de goleador histórico del cuadro merengue convirtiéndose en una leyenda viva para los madridistas y para el mundo. Su actuación y calidad dentro y fuera de la cancha, llevo al equipo español de regreso a las grandes competiciones, acostumbrándolos a ganar absolutamente todo. Sin embargo, todo lo que sube tiene que bajar, y en este caso no es porque se haya convertido en un jugador malo o haya realizado un acto indisciplinario, si no que las malas relaciones con el principal directivo y un mal acuerdo salarial pusieron fin a la aventura de ‘Míster Champions’ con los ‘Vikingos’.
Tras 9 temporadas de muchos éxitos y momentos felices, se despidió mediante una carta publicada en la página web del club, una peculiar manera de decir adiós que tienen las grandes estrellas del Real Madrid. "He reflexionado mucho y sé que ha llegado el momento de un nuevo ciclo. Me voy, pero esta camiseta, este escudo y el Santiago Bernabéu los seguiré sintiendo siempre como algo mío esté donde esté. Gracias a todos y, por supuesto, como dije aquella primera vez en nuestro estadio hace 9 años: ¡Hala Madrid!".
Con una nueva dirección y con aspiraciones fuera de España, el 10 de julio del 2018 se unió a la Juventus. En Italia, pretendía mostrar su buen juego y excelente condición física a sus 33 años enfrentándose a oponentes con mucha experiencia futbolística. Aunque, él sabía el gran reto que tenía que afrontar, no tuvo temor, y con decisión y firmeza decidió ponerse a la ‘Vecchia Signora" al hombro para llevarla de vuelta a la élite mundial futbolística. En el trayecto de llevar al equipo ‘Bianconero" a la gloria, este excepcional deportista ha roto récords, convirtiéndose en el primero en marcar 50 goles en las tres ligas más importantes del mundo: la Premier League, la Liga de España y la Serie A. Tan solo le bastaron 88 partidos para marcar 65 goles, superando a leyendas como el ucraniano Andry Shevchenko y al brasileño Ronaldo Nazário. Sin duda, ‘El Bicho’ ha sido muy determinante en estos dos años en la plantilla italiana.
La categoría magnífica de ‘CR7’ es como si se tratase de entender el descubrimiento de una galaxia grande, es prácticamente, un ser supremo o alguien sobrenatural que puede pararse delante de un arco y aturdir a los contrincantes con anotaciones épicas.
En la disputa por los cuartos de final frente al Olympique de Lion, el atacante luso hizo lo que pudo dentro del terreno de juego llevando la responsabilidad de clasificar a la semifinal, aun cuando la tarea de pasar a la siguiente fase correspondía al esfuerzo de toda la alineación planteada por el técnico. Actualmente, y muy aparte de la dura situación por la que atraviesa, el delantero lusitano sigue forjando su biografía a fuego lento, conquistando a una afición y a un público exigente que cada día le pide más por ser uno de los más sobresalientes.