Acá hay que ser claritos. De nada sirve qué ruta César Hinostroza tomó. Con quién se juntó para la identidad falsa. Si la policía e inteligencia no hacen su trabajo o el video de Migraciones. Esos son detalles o nudos menores de la ejecución de un plan mayor. ¿Olvidan quién es César Hinostroza Pariachi y de qué lo acusan?
El sindicado jefe de la organización criminal judicial más temida en años del Callao; y el Congreso ¿Qué hizo? Rechazó la recomendación del informe final para acusarlo constitucionalmente como presunto miembro de la organización criminal ‘Los Cuellos Blancos del Puerto’. Y eso se nos queda grabado.
Estaban los audios que lo incriminaban y nada. Y Pedro Chávarry, el Fiscal de la Nación y amigo íntimo del Exjuez fugado, feliz cruzado de brazos. Eso es notoria complicidad. Hay que decirlo con todas sus palabras. Porque si tienes a la líder de la oposición congresal acusada de reuniones con Hinostroza (Señora K), jamás, dichos congresistas, iban a permitir que lo capturen. Y así se encargaron de hacerlo. No les convenía, y sí que Hinostroza desaparezca para no tener el efecto desgastador hacia la figura de Keiko Fujimori. Y demoraron con la gravedad del caso el trámite hacia la Fiscalía unos 10 días. La mesa Directiva del Congreso debe renunciar. Los cuatro deben irse: Daniel Salaverry, los vicepresidentes Leyla Chihuán, Segundo Tapia y Yeni Vilcatoma.
Es la única muestra política hacia el pueblo indignado para pasar en algo la página. Porque acá hubo un mecanismo para la fuga de César Hinostroza. Hubo desgraciados congresistas fujiapristas que blindaron al infame.
Si tan solo hubieran hecho su trabajo, ahora no estaríamos lamentando su escape, porque al día siguiente la Fiscalía hubiera ordenado su detención preliminar en este supuesto escenario.
