Un atentado con explosivos se produjo la madrugada de este lunes 20 de enero en la sede del Ministerio Público en Trujillo, región La Libertad. La explosión, ocurrida en la avenida Jesús de Nazareth, cerca del Centro Histórico de la ciudad, dejó serios daños materiales y dos personas heridas, generando alarma entre los vecinos.
Según las primeras investigaciones, dos sujetos a bordo de una motocicleta habrían lanzado un artefacto explosivo frente al edificio. El impacto destruyó ventanas y afectó no solo la fachada de la Fiscalía, sino también viviendas, comercios y una institución educativa cercana. Incluso se reportaron daños en las instalaciones de la Universidad Nacional de Trujillo.
Entre los heridos se encuentra un vigilante del Ministerio Público y el conductor de un taxi de placa T1D-268 estacionado en el lugar, identificado como Luis Alberto. El vehículo quedó completamente destruido y el taxista fue trasladado inconsciente al Hospital Regional de Trujillo. Hasta el momento, su estado de salud no ha sido confirmado.
La Policía Nacional del Perú (PNP) y la Unidad de Desactivación de Explosivos (Udex) acordonaron la zona para iniciar las investigaciones. Cámaras de seguridad captaron el momento en que los responsables dejaron el explosivo, lo que podría facilitar su identificación. Las autoridades no descartan que este ataque esté relacionado con el aumento de extorsiones en la región.
El atentado ocurre en un contexto marcado por el estado de emergencia decretado por el gobierno de Dina Boluarte para combatir la delincuencia en el norte del país. Este episodio se suma a otros actos violentos registrados recientemente en La Libertad, como ataques con explosivos contra torres eléctricas y socavones mineros en Pataz.
El congresista Diego Bazán, representante de La Libertad calificó el hecho como un "atentado terrorista" y exigió acciones inmediatas al Ministerio del Interior. Mientras tanto, los residentes expresaron su temor ante posibles nuevos ataques, reflejando la creciente inseguridad que afecta al país.
Este ataque se suma a una serie de incidentes violentos en la región, incluyendo embestidas de mineros ilegales contra torres de alta tensión en la sierra de Pataz. El ministro del Interior, Juan José Santiváñez, reconoció recientemente que el Perú está experimentando una "ola criminal nunca antes vista".