“S/ 300.00 para tomarle la foto antes de que salga”, le ofrece un ciudadano extranjero a una persona que acaba de perder a un familiar víctima del nuevo coronavirus Covid-19, enfermedad que hasta el domingo se llevó a 26.281 compatriotas, según las cifras oficiales, y más de 50.000 según las extraoficiales.
La deficiencia en los protocolos para la entrega de cadáveres en la mayoría de los hospitales del país ha obligado a las mafias a encontrar una oportunidad para sacar el máximo provecho monetario posible de las desgracias ajenas.
Un informe de Panorama destapó una importante cadena de corrupción alrededor de la muerte en medio de la más grave crisis sanitaria que vive el país; y que involucra desde jaladores y funerarias hasta personal de seguridad y enfermeros.
Todo inicia cuando un paciente Covid pierde la vida y la noticia le es comunicada a su círculo íntimo. Inmediatamente un jalador, contratado por alguna funeraria, le ofrece a los deudos la posibilidad de tomarle una foto al cadáver para que se cercioren que el cuerpo que recibirán en una bolsa negra dentro de un ataúd, a su vez envuelto en plástico, es el de su familiar. El servicio cuesta S/ 300,00.
“Lo que pasa es que abajo son dos y los que ingresan son dos. (Los S/ 300.00 son) para dejarle su propina a ellos para que nos dejen tomar la foto porque es rapidito”. (…) (Hay que) dejarle por lo menos S/ 100.00 a cada uno”, le dice un jalador extranjero a un integrante encubierto del mencionado programa televisivo, sin saber que está siendo grabado. “Nosotros sí tenemos gente adentro, siendo sinceros. (…) Son gente del hospital, por eso hay que darles su propina cuando nosotros bajemos de una vez”, aclara.
La “propina” irá para alguna persona en el mortuorio y para otra en el archivo. La versión cambia totalmente cuando la periodista Carmen Alvarado de Panorama le consulta, micrófono en mano, por el servicio. “Nosotros no hacemos nada de eso”, asegura.
El informe periodístico también reveló que las funerarias ofrecen un “pack premium” por el monto de S/ 4.500,00, el cual consiste en entregar el cuerpo del fallecido por Covid-19 para que sea velado en su domicilio y a puertas cerradas, pese a que el Ministerio de Salud ha insistido en su prohibición, al ser un inminente foco de contagio.
El personal de seguridad de los nosocomios también saca provecho de la situación al cobrar entre S/ 5.00 y S/ 10.00 para agilizar la entrega de celulares, cargadores y pañales a los pacientes Covid hospitalizados.