Desde las 4 de la mañana, un grupo de ciudadanos realizaron una gran fila en los exteriores del local de Enel en la Av. Túpac Amaru, Comas para reclamar por los altos precios que deberán pagar por el consumo energía eléctrica; sin embargo, 4 horas más tarde un vigilante les informó que el personal no les atendería y que la oficina permanecería cerrada.
Ana Alvarado es madre de familia y una de las personas que, cansada de no obtener respuesta a través de la línea telefónica de la empresa, tuvo que aguantarse el frío de la mañana para reclamar personalmente porque Enel le envió un recibo de luz por S/ 400 cuando normalmente paga S/ 120.
“En el periodo de la cuarentena, por los 3 meses he pagado S/ 600 pero ahora en junio tengo que pagar S/ 400 por un solo mes. Ni que yo tuviera empresa en mi casa, taller de costura o algo que me jale demasiada luz”, dice Ana quien vive en un asentamiento humano en la intersección de San Felipe con la Av. Universitaria, en Comas. “Para cobrar y mandar el recibo por línea sí son buenos pero para dar la cara ahí no son buenos”, agrega.
Ana es una de las miles de víctimas de los cobros excesivos de Enel y Luz del Sur. Desde que EL PERFIL publicó el 22 de junio la información sobre recibos más caros, este medio ha recibido cientos de denuncias similares. Por si fuera poco, no todas estas personas tienen la opción de reclamar; no solo por la pésima o nula atención telefónica, sino porque en muchos casos, no son los titulares. Y los titulares quizás no entiendan la situación o no puedan salir de sus hogares.
“Ahora tiene que venir el titular, que en este caso es mi mamá y que es una anciana. No voy a exponer a mi mamá y encima para que nos cierren la puerta en la cara”, comenta Ana.
Ella al igual que otras personas acudieron esta mañana a Enel para buscar respuestas. Demás está mencionar su gran preocupación porque esta empresa, anteriormente llamada Edelnor, les cortará el suministro eléctrico el 20 de este mes según el recibo que les llegó, pese a no contar con deudas pendientes.
Hace algunos días las empresas eléctricas informaron que en los próximos recibos enviarían el precio corregido al consumo real. Sin embargo, si Ana no paga este recibo de S/ 400 por un solo mes, no tendrá luz.
Los usuarios que también acudieron a Enel esta mañana consultaron a personal de alumbrado público de esta empresa si era cierta la información del corte si no se pagaba el recibo de un mes. La respuesta de los trabajadores fue afirmativa.
Según Hans Berger, un alto funcionario de Luz del Sur, “el problema es el Decreto de Urgencia 035-2020 que indicó que durante el periodo de emergencia no se podían leer los medidores y había que facturar a promedio considerando los 6 meses previos a la cuarentena y que cuando se lea, se liquidaría el consumo real”.
“Como se ha leído después de 3 o 4 meses, el consumo extra está en el último recibo. Caso inverso ha sucedido con los locales que estuvieron cerrados, que en abril y mayo les salió como si el consumo fuera normal. El próximo mes se leerá como de costumbre y será de lectura a lectura. Mucha gente indica que se les ha triplicado el recibo y es porque no pagaron 3 meses”, agrega Berger.
Sin embargo, gran mayoría de las personas que denuncian recibos triplicados sí han seguido pagando con mucho esfuerzo los consumos por los meses de cuarentena, como el caso de Ana, pero de todas formas han recibido un recibo exorbitante.
“Ellos ponen el monto al azar porque se les da la gana. Nadie va a ver la lectura. Por teléfono me dijeron que es por el periodo de cuarentena que están cobrando esa cantidad porque la gente no sale de su casa. ¿Cómo saben ellos que no salimos de la casa? Si nosotros no tenemos un trabajo estable, una empresa que nos respalde. ¿Cómo saben que todos hemos estado metidos ahí? ¿A ellos les conta? No”, cuestiona Ana.
La jugada de las empresas eléctricas podría explicarse con la decisión del Gobierno de Martín Vizcarra de pagar los recibos de luz de la población vulnerable. Lo que llama la atención es que este pago no será a través de un bono que puedan cobrar las personas para pagar sus recibos, sino que el Estado le depositará directamente a Enel y Luz del Sur sin intervención de los usuarios. Sin una urgente fiscalización, las empresas podrán (si es que ya no lo han hecho) maquillar los números y recibir fácil y gratuitamente parte del dinero de todos los peruanos.
