En el santoral cristiano del 19 de julio, se destaca la conmemoración de San Arsenio el Grande, uno de los Padres del desierto más reconocidos en la historia de la Iglesia. También se celebra la memoria de otros santos y mártires cuyas vidas han dejado una huella significativa en la fe cristiana.
San Arsenio el Grande: Anacoreta y padre del desierto
San Arsenio el Grande nació en el año 354 en Roma, descendiente de una familia noble con vínculos senatoriales. Después de recibir una formación completa, fue nombrado diácono por el Papa Dámaso I, quien lo recomendó al emperador Teodosio I el Grande como tutor de sus hijos, Arcadio y Honorio. San Arsenio se desempeñó en este cargo durante 11 años en Constantinopla, donde impartió su vasto conocimiento de la literatura griega.
Al concluir su labor como tutor, San Arsenio decidió unirse a los monjes y ascetas del desierto de Egipto, donde se dedicó a una vida de oración, penitencia y contemplación. Por sus austeridades y su búsqueda de la santidad en el retiro del mundo, San Arsenio es considerado uno de los Padres del desierto más eminentes, conocido como un anacoreta.
Otros santos celebrados este día
Además de San Arsenio el Grande, el santoral del 19 de julio incluye la conmemoración de otros santos y mártires venerados en la tradición cristiana:
- San Juan Bautista Zhou Wurui
- San Juan Plessington
- Santa Macrina de Annesis
- San Símaco de Roma, Papa
- Santa Áurea de Córdoba
- San Bernoldo de Utrech
- San Dío el Taumaturgo
- San Epafras
Cada uno de estos santos y mártires ha dejado una marca indeleble en la historia de la fe cristiana, inspirando a los fieles a vivir vidas de santidad y entrega a Dios. Que sus vidas ejemplares continúen siendo una fuente de inspiración y guía para todos los creyentes en su camino espiritual.
El significado de celebrar el santo
La celebración del santo tiene sus raíces en la tradición cristiana, donde se honra la memoria de aquellos que vivieron vidas ejemplares de santidad y sacrificio por su fe. Aunque esta práctica puede variar en su observancia según la cultura y la región, su significado fundamental es recordar y rendir homenaje a los santos y mártires que nos han precedido en la fe cristiana.
En este día especial, los creyentes se unen en oración y gratitud por la vida y el legado de San Arsenio el Grande y todos los santos venerados en el santoral del 19 de julio. Que sus vidas inspiren a seguir creciendo en la fe y el amor a Dios y al prójimo, y que su ejemplo nos impulse a vivir vidas de santidad y servicio según el Evangelio de Jesucristo.
¿Qué es el santoral?
El santoral es el conjunto de personas veneradas en la Iglesia Católica como santos o beatos en una fecha del calendario determinada. Los santos son personas que han vivido una vida ejemplar de fe y caridad, y que han sido reconocidas como tales por la Iglesia. Los beatos son personas que han dado muestras de santidad, pero que aún no han sido canonizadas.
¿Cómo se convierten los santos?
El proceso de canonización es un proceso largo y complejo que puede durar siglos. El primer paso es la investigación del candidato a santo, para comprobar que su vida fue realmente ejemplar y que murió en estado de gracia. Si la investigación es positiva, el candidato es declarado venerable.
El siguiente paso es la beatificación, que es la declaración oficial de que el candidato es beato. Para ello, se necesita un milagro atribuido a la intercesión del candidato. Si el milagro es reconocido por la Iglesia, el candidato es beatificado.
El último paso es la canonización, que es la declaración oficial de que el candidato es santo. Para ello, se necesitan dos milagros atribuidos a la intercesión del candidato. Si los milagros son reconocidos por la Iglesia, el candidato es canonizado.