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Este artículo es de hace 1 año

Perú: 2024 con sorpresas previsibles

Les alegraría ver cansado y sin brío al director de Hildebrandt en sus trece. Y les haría feliz ver al fundador de IDL-Reporteros ingresando a la cárcel. Algunos envidian la inteligencia, el coraje, el ingenio y la chispa ¿por qué? La hipótesis es que se incrementarán los tirajes y se seguirán leyendo más periodismo de investigación durante este año. 
Lucas Lavado

La futurología tiene un gran pasado y quedó. El realismo prudente tiene que ver en cambio con la realidad histórica registrada, las condiciones sociológicas constatadas, el recuento de las disponibilidades financieras y el capital intelectual. En un telón fondo como el cambio climático imprevisible, el cambio tecnológico disruptivo que tiene como eje la inteligencia artificial en manos de poderosas empresas en un multipolar donde Norteamérica, como dicen los chicos de nuestras calles, “ya fue”. ¿Estamos preparados para el análisis de una realidad emergente incontrolable? Veredes, Sancho: se lee en El Quijote.

El sistema jurídico no se “ve” porque requiere análisis. Se mueve, sí. Se reanima sí, pulula, sí. Pero aún subsiste como hace doscientos años como promesa de justicia repetida hasta la saciedad. La publicidad nunca muere, la parafernalia nunca se apaga, en bombo siempre suena. ¿Entonces? Sobran los agoreros, los cronistas truchos de lecturas que no pasan más allá de nuestras fronteras creadas por el y de los negocios para comprar favores. El acceso a la justicia y los son letra muerta que a veces suena cuando allanan las oficinas periodísticas cercanas la verdad. La verdad dicha con dignidad y honor no engaña y no tiene atenuantes. Ese instante es como descorrer el velo para ver el mundo como es. Llegará el día.

¿Y la fiscalía? ¿Se ha suscitado en cambio después de remover a la Fiscal? No y No. ¿En qué consistirían los ? Han callado los jurisperitos, los maestros de derecho, los fiscales prestos a declarar para darle los oídos de los que ganan cuando se demoran los procesos judiciales gordos. Ente tanto se hace política hablando y escribiendo acerca de las próximas elecciones donde los candidatos “sorpresa” saldrá del lugar de siempre, de donde todos sabemos. Y la publicidad se está pensando para hacernos “ver” a los electores las figuras de “recambio”. Para eso se estudia publicidad. Basta averiguar y saber sin mucho detalle qué porcentaje de sus ganancias destinan a la publicidad la cerveza, la leche que nos devuelve Ecuador, etcétera.

La Junta Nacional de Justicia parece que depende de un resucitador de coraje y empaque jurídico. Sin duda se puede presentar figuras desgastadas mostrando con cuidado publicitario adecuado. Pero por desgracia la realidad excede las pequeñas vanidades, las mensualidades que arañan y los compromisos que oprimen. No es necesario reestudiar los trabajos más serios en nuestro medio que los hay para entender los mecanismos y los resortes del poder que transforman a las personas en figuras apenas dibujadas que asoman el saco y la corbata atada con disfuerzo. Cuánto necesitamos que se alcen voces ilustres de fuera que nos ayuden a decir que el está gobernado por “corruptos y autoritarios”. Como cuando se decía San Martín, Bolívar, Sucre…

Hay cada vez menos recursos para financiar la ciencia, la tecnología y la educación. Y se seguirán pagando magros sueldos a los profesores universitarios explotados inmisericordemente por universidades de dudosa calificación que siguen aumentando a paso firme. Pueden seguir propalando desde la “cumbre” con pañuelo huachafo al cuello que “tenemos una capacidad de resistencia…” y debemos “mantener la ecuanimidad y la calma”. Sí. Lo ha dicho el doctor. Entonces como un hato disciplinado de ovejas basta que hablen los capataces para seguir el sonido de la música y del cencerro. Todo marchará igual como antes sin mover una piedra que moleste al patrón.

Ojalá que los padres entendieran los escollos de la “nueva pedagogía” con el que los alumnos iban a jugar y divertirse a la escuela para aprender. No es así. A la escuela los niños van a aprender, a tener nuevas experiencias. A la escuela van a aprender a sumar, restar, multiplicar y por su puesto los algoritmos que son la base de la inteligencia artificial que deslumbra el mundo actual. Estamos como antaño comprando máquinas de coser, pero no sabemos arreglarlo ni fabricarlo. A la escuela y a la universidad se van a estudiar la sociedad, los sistemas sociales y los mecanismos que hacen que las sociedades se muevan, se gobiernen y que se desarrollen. A la escuela y la universidad se van a descubrir los nuevos saberes, las nuevas tecnologías, es verdad que también a chatear pero aquel chateo que le lleve a generar discusión, , creatividad. ¿Por qué odian los chicos las somníferas clases? Si no se quiere admitir estas minucias alguien tiene que asumir responsabilidades.

Los Gobiernos, el orden público, la ciudad y la población con enormes desventajas obliga a hacer preguntas que se apilan. ¿Cuántos policías están fuera de la organización por delinquir y por qué cusas específicas se están incrementando? ¿Cuántos jueces y fiscales están fuera del sistema y qué castigos han merecido? ¿Qué ha pasado con las mediocremente publicitadas tesis plagiadas y de investigaciones fraguadas para ganar que más parecen de cartón?

Les alegraría ver cansado y sin brío al director de Hildebrandt en sus trece. Y les haría feliz ver al fundador de IDL-Reporteros ingresando a la cárcel. Algunos envidian la inteligencia, el coraje, el ingenio y la chispa ¿por qué? La hipótesis es que se incrementarán los tirajes y se seguirán leyendo más de investigación durante este año.

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El análisis y las expresiones vertidas son propias de su autor/a y no necesariamente reflejan el punto de vista de EL PERFIL
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Colaborador de EL PERFIL
Profesor en Filosofía y Ciencias Sociales. Magíster en Docencia Universitaria y Doctor en Ciencias de la Educación. Ha editado más de 400 títulos.