Ha pasado la fase de grupos de un Mundial lleno de equivocaciones, lo que sigue siendo el sello de identidad de un deporte apasionante por imprevisible. Los videos de Adidas o Nike nunca estuvieron mƔs alejados de la realidad porque las llamadas a ser estrellas del torneo no han brillado, apenas tuvieron destellos y algunas han terminado por apagarse definitivamente (Gareth Bale, Kevin De Bruyne, Manuel Neuer). No ha habido conjunto capaz de marcar diferencias notorias en sus tres primeros partidos.
QuizĆ” los mĆ”s destacables sean Brasil, Francia y Portugal que, tras ganar sus dos primeros partidos, no se hicieron problemas de usar suplentes en el tercero; ademĆ”s de Inglaterra que logró la mayor diferencia de goles (+7). PaĆses Bajos y Marruecos fueron los Ćŗnicos invictos. Otros equipos clasificados no han mostrado lo que se esperaba de ellos, como Croacia y Polonia, mientras que los tropiezos de las āfavoritasā Argentina y EspaƱa figuran entre lo mĆ”s llamativo.
Penales errados de los Ćdolos Lionel Messi y Robert Lewandowski; jugadores en deuda (Neymar Jr. lesionado, Kylian MbappĆ© solo pudo estar en dos partidos completos, Cristiano Ronaldo muy errĆ”tico y Luka Modric escaso de momentos memorables); y ausencia de algunos goleadores muy esperados como Harry Kane, Vinicius Jr., Luis SuĆ”rez y Lautaro MartĆnez muestran que en el fĆŗtbol hay que esperar siempre la sorpresa en vez de la consagración.
En este mundial lo fueron Japón, Marruecos y Corea del Sur; ademĆ”s del neerlandĆ©s Cody Gakpo, el argentino Enzo FernĆ”ndez y el alemĆ”n Jamal Musiala. Se espera mucho mĆ”s de otros cracks como Pedri, Ousmane DembĆ©lĆ© y Bukayo Saka que, aunque sean jóvenes, podrĆan llevarse mĆ”s flashes si se eleva el nivel de sus equipos. Menciones adicionales a Richarlison, Breel Embolo y Bruno Fernandes que pueden terminar de consagrarse en estos octavos de final.
De momento, las estadĆsticas poco ayudan para plantear favoritos, considerando que no hubo equipos que hayan ganado sus tres partidos, y solo dos (Inglaterra y EspaƱa) anotaron nueve goles (cinco equipos clasificados recibieron solo un gol). Eso sĆ, hay muchos jugadores a los que se espera ver en el gran rendimiento mostrado: Wojciech SzczÄsny (portero de Polonia), Virgil van Dijk (PaĆses Bajos) y Pepe (Portugal) en defensa, Achraf Hakimi (Marruecos) y Tyler Adams (Estados Unidos) en el medio.
Se dice que suele haber un quiebre en esta segunda parte del torneo. OjalÔ que la conservadora Naranja MecÔnica, la irregular Scaloneta y la atropellada Furia Roja empiecen a sacar las credenciales para llegar a los cuartos de final. De momento, en el mundial de las equivocaciones (arbitrales, de VAR y de planteamientos técnicos: el argentino Scaloni, el español Luis Enrique, el uruguayo Diego Alonso) le pueden tocar buenas cartas a Estados Unidos, Japón, Marruecos y, por qué no, a Corea del Sur, Senegal y Australia, que parecen los mÔs débiles.
Nos despedimos del empeƱoso Ecuador, del sorpresivo y āpolĆticoā IrĆ”n, de la exquisita Arabia Saudita, la inexistente Dinamarca, la insuficiente Alemania, la desilusionante BĆ©lgica, la desorientada Uruguay y la prometedora Serbia, pero queda mucho por ver y soƱar en un Mundial de equivocaciones, empezando por el paĆs anfitrión, cuya fiesta estĆ” empaƱada por las muertes en las construcciones de los estadios y un discurso polĆtico trasnochado.