Mario Vargas Llosa se llena la boca diciendo que es un liberal militante. La realidad prueba que Vargas Llosa no es liberal activo, sino un mercantilista, un neoliberal defensor de los intereses de las empresas abusivas y de sus políticos escuderos.
El silencio de Vargas Llosa sobre el daño causado por Repsol lo pinta de petróleo como a Keiko Fujimori, quien tampoco ha pedido a la empresa española que se haga cargo de los daños que ha causado el derrame de 6.000 barriles de petróleo.
Sin embargo, los liberales en serio sí están en campaña para que Repsol no se lave las manos y asuma su responsabilidad.
En este video explicativo, el economista liberal español Juan Ramón Rallo exige que Repsol se haga responsable de la limpieza total; además, de indemnizar a las familias, víctimas de la tragedia ecológica.
Juan Ramón Rallo indica que Repsol tiene el deber de limpiar e indemnizar porque la contaminación es consecuencia de que realiza una actividad lucrativa por decisión propia, y que, si ocurre un derrame, es la indicada para solucionar los problemas.
Rallo sostiene también que su posición se sustenta en el liberalismo porque esta filosofía política plantea la libertad de comercio y el libre mercado; pero que, si en ese proceso se daña a terceros, la empresa involucrada debe hacerse responsable.
“No hace falta esclarecer ninguna responsabilidad subjetiva para que Repsol en Perú se tenga que hacer cargo no solo de limpiar las playas, que en parte ya lo está haciendo, sino también de indemnizar a todas las víctimas, por ejemplo, los pescadores”, dice.
Rallo sí actúa como un liberal militante. Vargas Llosa, en cambio, ahora solo sabe cuidar las espaldas de Keiko y de sus financistas.