“Keiko podría estar convencida de que su hermano es un traidor para que su mente guarde la coherencia de que está actuando correctamente. Esa es la mentalidad de quienes tienen tendencia a la tiranía. Se genera una especie de paranoia y se empieza a detectar a lo ‘buenos’ y a los ‘malos’. A los ‘malos’ se los elimina, así sea un hermano”, explicaba el psicoanalista Pedro Morales a la revista Cosas en el 2018. Ahora, lejos de los enfrentamientos de aquella época, Kenji y Keiko Fujimori decidieron amistarse públicamente. ¿Cómo pasaron de enfrentarse políticamente a reencontrarse en medio de una segunda vuelta asolada por la pandemia?
Desde el Gobierno de Alberto Fujimori (1990-2000), se notaba una marcada preferencia de este por el menor de sus hijos, Kenji. Los otros hermanos, Sachi, Hiro y Keiko, eran dejados de lado, al menos aparentemente. Pero Keiko ya se perfilaba como heredera política de Alberto. “Fujimorismo hay para rato. Le aseguro que de todas maneras habrá uno o una heredera, si es que yo no estoy presente ahí(sic)”, declaró el patriarca en una entrevista recogida en el libro “El informe Chinochet” (2018), del politólogo Carlos Meléndez. Tras el encarcelamiento del exmandatario, Keiko se dedicó a crear una fuerza política que le permitiera llegar al sillón presidencial.
Pininos en política
El 6 de enero del 2006, Keiko logró inscribir su partido Alianza por el Futuro, en el que figuraba como candidata número 1 al Congreso. Fue Martha Chávez Cossio, actual congresista, quien postulaba para la presidencia del Perú. Keiko fue la congresista más votada en aquellos comicios. Su hermano, Kenji, encabezó la lista de candidatos al Congreso de Fuerza Popular en el 2011 y, al igual que su hermana, fue el legislador que más votos obtuvo. En ambas elecciones, el fujimorismo no tuvo mayoría en el Congreso.
En los comicios del 2016, el partido Fuerza Popular, liderado por Keiko Fujimori, obtuvo 73 curules, con lo que ostentaba una amplía mayoría. Kenji nuevamente fue el congresista con más votos.
En ambas elecciones, 2011 y 2016, Kenji fue el candidato al Congreso con mayor número de votos. Pero Keiko, que postuló a la presidencia en ambas oportunidades, no tenía tanta aceptación como su hermano. ¿A qué se debe esto?
“Lo consideran (a Kenji) el hijo leal que busca la libertad del padre sin ningún interés político. No puede decirse lo mismo de Keiko a quien le endilgan los adjetivos de dura, arbitraria o insensible”, afirmó Martín Riepl para la BBC. “Tenemos una agrupación política de carácter cuasi dinástico con una Fujimori que, aunque líder, ha perdido dos elecciones presidenciales consecutivas, y otro Fujimori que ni carga con ese pasivo ni genera el nivel de rechazo de su hermana”, agregó.
El cisma
El distanciamiento entre ambos hermanos inició en el 2016. Aquel año, Kenji no fue a votar. Esto causó extrañeza, pues su hermana aspiraba a la presidencia por segunda vez. Tiempo después, el menor de los Fujimori reveló que no votó porque el día de las elecciones, durante el desayuno, su hermana lo había llamado “inútil” y que se había sentido maltratado.
Fue el candidato opositor, Pedro Pablo Kuczynski, quien resultó victorioso en los comicios de aquella vez. Desde el Congreso, Kenji enfrentó duramente a su hermana. Sus propuestas liberales en un partido conservador, buscar la liberación de su padre, criticar el carácter vertical del partido de su hermana y su acercamiento al Gobierno de Kuczynski le sirvieron para forjarse una identidad propia, distinta a la imagen de “hermano menor” que reflejaba anteriormente. Así fue ganando apoyo político y, debido a las disidencias, fue sancionado dentro de su partido. Se supo después que 23 congresistas habían firmado una carta a Keiko solicitando que se suspenda la sanción contra su hermano. “Este documento refleja tanto las diferencias en el partido como su carácter casi monárquico, al apelar a la voluntad de la lideresa antes que a la institucionalidad de la agrupación”, apuntó Riepl.
En aquella ocasión, el exmandatario Alberto Fujimori twitteó en contra de la sanción a Kenji.
Junto con otros 9 congresistas (Bienvenido Ramírez, Clayton Galván, Marita Herrera, Estelita Bustos, Guillermo Bocángel, Sonia Echevarría, Lizbeth Robles, Maritza García y Marvin Palma), a quienes llamaría los “Avengers“, Kenji impidió que prospere el pedido de vacancia, impulsado por su hermana, en contra del entonces mandatario PPK.
Su padre, Alberto Fujimori, fue indultado 3 días después, el 24 de diciembre el 2017, pese a que Keiko había declarado públicamente que no solicitaría el indulto.
“(Los keikistas) consideran la posible libertad del patriarca como una amenaza al liderazgo de Keiko. De hecho, la misma bancada fujimorista mandó al archivo un reciente proyecto de ley que podía haberle dado prisión domiciliaria al ex presidente”, apuntó Riepl para la BBC. “Si el temor de los keikistas era que los albertistas dividieran el liderazgo del partido con la libertad del ex presidente Alberto Fujimori, jugaron sus cartas de tal manera que terminaron por fortalecer la imagen de Kenji, hoy por hoy, una amenaza real a la posición de su hermana”, agregó.
Todos estos actos de rebeldía llevarían a Kenji a ser expulsado de la bancada, junto con Bienvenido Ramírez y Maritza García. Otros 7 congresistas de Fuerza Popular renunciaron tras conocer la decisión de la comisión disciplinaria del partido.
“Para tomar la decisión de dar un paso importante de renunciar a la bancada del partido Fuerza Popular, es porque nosotros hemos sido atropellados de manera constante por la cúpula del partido”, declaró Kenji. Durante el debate en su contra, el excongresista remarcó: “Si alguno cree que aquí termina mi vida política, está totalmente equivocado porque esto recién empieza”. Ya había declarado anteriormente que, “solo en caso que Keiko no gane las elecciones presidenciales (en el 2016)”, formaría un partido propio y postularía en el 2021. Keiko declaró ese mismo año que “en el 2021 no habría ningún candidato de apellido Fujimori”.
“La expulsión de Kenji del Congreso es un equivalente simbólico por parte de Keiko de quitarle el apellido”, dijo el psicoanalista Augusto Escribens para el portal “Cosas” en el 2018.
“Tratar con Kenji es como tratar con un hijo adolescente”, expresó la congresista Úrsula Letona, burlándose de Kenji por, supuestamente, no haber superado viejas fases emocionales a sus entonces 37 años.
Fuerza Popular quería el control total del parlamento
Al poco tiempo, se difundieron videos en los que presuntamente se aprecia a Kenji comprando votos en contra de la vacancia de PPK, por lo que el Ministerio Público solicitó 12 años de prisión y 15 años y 3 meses de inhabilitación política. Ante esto, el menor de los Fujimori lamentó “las bajezas y las actitudes delincuenciales de Fuerza Popular y de mi hermana Keiko, grabando de manera oculta y tergiversando información”. “Lo que ha quedado demostrado es la sed de poder de Fuerza Popular; lo que querían era tener control total del Parlamento”, aseveró el excongresista tras la audiencia que enfrentó por la presunta compra de votos.
Hoy estamos unidos otra vez
Ambos hermanos se reencontraron, tras las disputas, el 5 de noviembre de ese mismo año, en el penal de Mujeres de Chorrillos. Keiko había sido encarcelada 5 días antes, a pedido del juez Richard Concepción, quien dictó una orden de 36 meses de prisión preventiva por la acusación de encabezar una presunta organización criminal que lavó US$ 1 millón entregado por la empresa constructora Odebrecht en el 2011. El encuentro se habría producido a pedido de sus padres, Alberto Fujimori y Susana Higuchi. Se supo que ese mes, Keiko intercambió cartas con su padre.
Tras esta visita, los hermanos se mantuvieron distanciados. “Nuestra relación es distante, sí, es verdad, pero en el caso de la boda de mi hermano (Kenji Fujimori) lamentablemente no invitó a ninguno de mis hermanos ni les avisó a mis padres. Me imagino que, por la pandemia, él lo quiso hacer de manera muy discreta, su reserva en realidad fue con toda la familia y no solo conmigo. No (lo he felicitado), yo espero encontrar el espacio con él, más adelante cuando él lo estime conveniente”, declaró Keiko en una entrevista para El Comercio.
Tras haber rechazado tajantemente el indulto a su padre en años anteriores, Keiko decidió, en estas elecciones, llevar la bandera del indulto humanitario. El Comercio informó que, según sus fuentes, Kenji creía que se trataba de una estrategia política, pues de no ser así, no hubiera esperado otras elecciones para tratar el tema públicamente.
“Hoy estamos unidos otra vez. El fujimorismo vuelve a asumir el rato de salvar al país”, publicó en su cuenta de Twitter Alberto Fujimori el 5 de noviembre del 2020, compartiendo un video publicado por su hija Keiko Fujimori.
Tras el pase de Keiko a la segunda vuelta, Kenji publicó en redes sociales un video en el que pide votar por su hermana. “Todos somos Keiko. Apoyar a Keiko para defender el modelo económico que permite el emprendimiento y el trabajo”, afirma en el video. Este hecho llamó la atención ya que el menor de los Fujimori Higuchi se mantenía, hasta aquel momento, alejado de la política.
Desde entonces, Kenji ha publicado casi a diario en Twitter diversos videos en los que pide apoyar a su hermana y “salvar al Perú del comunismo”. Pero estos videos pasaron a segundo plano el 3 de mayo, fecha en la que el excongresista publicó un video distinto, afirmando que se había infectado de COVID-19.
Aparentemente recuperado, el 12 de mayo Kenji Fujimori publicó una foto junto a su hermana Keiko, afirmando que volvían a encontrarse después de 2 años.
Los hermanos se reconciliaron públicamente el 15 de mayo, en un debate organizado en Santa Mónica. El evento no se llevó a cabo ya que el candidato opositor, Pedro Castillo, no asistió, pues esa misma tarde realizó un mitin en el distrito de La Victoria.
“Hoy comparto también un hecho importante. Esta mañana tuve la oportunidad, después de varios años, de poder reencontrarme con mi hermano Kenji y de poder verlo recuperado de su salud. Para mí ha sido una bendición, un regalo de Dios”, expresó la candidata.
Kenji subió al estrado y, entre lágrimas, abrazó a su hermana.
“Keiko, hermana, no estás sola. Señor Pedro Castillo, quiero dirigirme a usted y decirle que mi hermana no está sola y que su actitud cobarde, misógina no lo vamos a tolerar, no lo podemos permitir. Nosotros no queremos crear un clima de odio”, declaró, al parecer, dejando de lado las anteriores disputas.
La politóloga Kathy Zegarra considera que Keiko Fujimori perdió apoyo desde el 2016 no solo por el comportamiento de su bancada, sino también por el enfrentamiento mediático con su hermano.
“Los que hace este acercamiento es consolidad el núcleo duro y aporta la unificación de dos corrientes (keikistas y kenjistas)”, asegura el analista político Enrique Castillo a El Comercio. “En este caso, debe haber habido una presión muy fuerte de Alberto Fujimori. Él debe haber jugado un papel fundamental en este acercamiento”, agrega.