Este viernes se publicó, sin conferencia de prensa de por medio, la extensión del estado de emergencia hasta el 31 de julio y el levantamiento de la cuarentena o confinamiento a partir de este miércoles 1 de julio.
Desde el inicio de las medidas tomadas por la emergencia sanitaria por el nuevo coronavirus Covid-19 el pasado 15 de marzo, ambos términos han estado entrelazados pero no son lo mismo.
La cuarentena, confinamiento o encierro, también llamado oficialmente como “aislamiento social obligatorio“, es la medida por la cual todas las personas debían mantenerse en sus viviendas para evitar la propagación descontrolada del virus.
Mientras que el estado de emergencia es una figura por la cual el Gobierno está facultado a asumir plenos poderes para tomar una serie de medidas cuando en el país exista perturbación de la paz o del orden interno, catástrofes u otras graves circunstancias que afecten la vida de la Nación. El estado de emergencia tiene una duración máxima de 60 días; sin embargo, puede ser ampliado y es exactamente lo que ha sucedido en el último tiempo.
Con el estado de emergencia pueden restringirse o suspenderse los derechos relativos a la libertad y la seguridad personal, la inviolabilidad del domicilio y la libertad de tránsito y reunión: lo que también ha sucedido en estos meses.
Cuando se extiende un estado de emergencia, se puede prolongar o dejar sin efecto algunas de las medidas declaradas en este periodo; como por ejemplo, en esta oportunidad se está dejando sin efecto la cuarentena obligatoria en todo el país, excepto en 7 regiones.
Existe otra figura adoptada en las últimas semanas y que también ha generado confusión: la emergencia sanitaria. Esta es una medida más simple que permite tomar acciones rápidas para enfrentar una crisis de salud; en este caso, la del coronavirus. Con esta figura se puede contratar personal médico (nacional e internacional), comprar medicamentos, insumos, materiales, equipos de protección, entre otros.