El líder de la oposición venezolana, Juan Guaidó, dijo el lunes que los partidarios que se habían comprometido a apoyar su abortado levantamiento la semana pasada "no habían cumplido su palabra" de desalojar al presidente Nicolás Maduro.
Pero eso "no significa que no lo harán pronto", dijo Guaidó a AFP en una entrevista en Caracas.
Guaidó, autoproclamado como presidente interino, dijo que "evidentemente hoy en día, existe un descontento generalizado del cual las Fuerzas Armadas no son inmunes".
"Ha habido discusiones (...) con funcionarios civiles y militares que están listos para ponerse del lado de nuestra Constitución", dijo. "Soy muy optimista dado que estamos muy cerca de lograr un cambio en Venezuela", agregó.
El jefe de la Asamblea Nacional, de 35 años, calificó a Maduro de usurpador en su controvertida reelección el año pasado, y en enero se declaró a sí mismo como presidente interino, sumiendo a Venezuela en una crisis política que agravó sus graves problemas económicos.
Pero Maduro se ha mantenido firme, reforzado por el apoyo continuo de las poderosas Fuerzas Armadas.
Guaidó, sin embargo, expresó la esperanza de que el Ejército se subleve.
"Estamos esperando que muchos más se unan para expresar su descontento y para participar en la 'Operación Libertad'", dijo.
De los que lo hicieron, 25 soldados buscaron refugio en la Embajada de Brasil tras el frustrado operativo.
Protesta 'cumplida'
El intento de levantamiento provocó dos días de violentos enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los manifestantes que dejaron cinco muertos, decenas de heridos y más de 233 detenidos.
Las autoridades también han emitido 18 órdenes de arresto contra "civiles y conspiradores militares", según el Fiscal General Tarek William Saab.
Guaidó ha tratado de mantener la presión con protestas masivas en las calles, pero su último llamado a las manifestaciones el sábado atrajo solo a varios cientos de personas. Sin embargo, rechazó las sugerencias de que su movimiento de oposición era plano.
"El sábado, creo que la protesta se cumplió. Un objetivo clave para nosotros fue redirigirla hacia la no violencia", dijo.
Mientras tanto, Maduro apareció en un ejercicio militar con el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, quien, según los principales funcionarios de Estados Unidos, dijo que estaba en el intento de levantamiento, pero se retiró.
"A los generales y almirantes les dije ayer: lealtad, quiero una lealtad activa", dijo Maduro en un discurso ante unos 5,000 soldados que se transmitió a nivel nacional por radio y televisión.
Las tensiones en Venezuela se han disparado desde que Guaidó invocó la Constitución para declararse presidente en funciones.
Como las principales potencias mundiales han sido atraídas, los Estados Unidos han lanzado su apoyo detrás de Guaidó, mientras que China y Rusia han respaldado a Maduro.
Washington ha declarado repetidamente que "todas las opciones están sobre la mesa", incluida la intervención militar en Venezuela para ayudar a Guaidó a expulsar a Maduro.
Sin usar un lenguaje tan antagónico, Guaidó dijo que podría buscar "la cooperación extranjera para superar la crisis sin precedentes que está atravesando Venezuela".
Cuando se le preguntó sobre la intervención militar, solo dijo que era una "opción controvertida".