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Este artículo es de hace 4 años

Dos libros claves para entender el vínculo literario entre García Márquez y Vargas Llosa

La editorial Alfaguara acaba de publicar "García Márquez: Historia de un deicidio" y "Dos soledades. Un diálogo de la novela en América Latina", títulos inencontrables que sufrieron un duradero destierro literario.
Stefanno Placencia

Los lectores de Vargas Llosa y García Márquez dejarán de visitar a los libreros de viejo para conseguir dos libros fundamentales que ahondan en las pasiones literarias de los protagonistas del boom latinoamericano. La razón: el sello Alfaguara acaba de rescatar del olvido y reeditar "García Márquez: Historia de un deicidio" y "Dos soledades. Un diálogo de la novela en América Latina", publicaciones que ya se encuentran a la venta en distintas librerías.

REGRESO DE UN DEICIDA

"García Márquez: Historia de un deicidio", publicado hace 50 años por Barral Editores en convenio con la editorial venezolana Monte Ávila, es un prolijo ensayo que Vargas Llosa escribió sobre un capítulo de la obra de García Márquez. Abandonando las convencionales técnicas académicas, pero dotado de un olfato agudo y autodidacto propio de un lector veinticuatrosiete, el premio nobel peruano desmenuza con rigor los demonios y las preocupaciones, las historias increíbles y poco creíbles que Gabo le escuchaba a su abuelo y que, en paralelo, pulían su prosa que alcanza un descomunal potencial en "Cien años de soledad", "la novela total".

Para el autor de "La casa verde", "Cien años de soledad", texto monumental de la narrativa universal, es "una novela total por su materia, en la medida en que describe un mundo cerrado, desde su nacimiento hasta su muerte y en todos los órdenes que lo componen". Ese mundo, impregnado de realismo mágico por donde se le lea y se le mire, encuentra su nacimiento en la infancia de su creador, específicamente de los recuerdos de Aracataca. Así lo deja entrever la primera parte del libro de 664 páginas.

Luego de haberle mostrado al lector la vida personal y real del autor de "La hojarasca", Vargas Llosa examina, con cautela, las primeras creaturas de García Márquez: "La hojarasca" (1955), "El coronel no tiene quien le escriba" (1961), "Los funerales de la mamá grande" y "La mala hora", estas dos últimas publicadas en 1962. El examen se detiene y culmina en "Cien años de soledad" (1967), donde Macondo, después de veinte años en idas y vueltas, se consolida como un territorio mítico de la literatura universal y a su artífice como "un suplantador de Dios".

UN DIÁLOGO INOLVIDABLE

La reedición de "Dos soledades. Un diálogo de la novela en América Latina" confirma que estamos ante un acontecimiento editorial. El documento reproduce el diálogo que Vargas Llosa y García Márquez protagonizaron en la facultad de Arquitectura, Urbanismo y Artes de la Universidad Nacional de Ingeniería de Lima, los días 5 y 6 de septiembre en 1967. Al año siguiente, se publicó la conversación de los dos premios nobel de literatura bajo el título "La novela en América Latina: diálogo". Esa primera edición hoy es inencontrable, al igual que la edición de "García Márquez: Historia de un deicidio" de 1971. Y si a cualquier seguidor de estos escritores latinoamericanos se le presenta la oportunidad de adquirir estas obras rebuscadas, sencillo: debe pagar capricho y en silencio.

El crítico literario José Miguel Oviedo organizó el encuentro entre los dos escritores que, mediante cartas, ya se habían manifestado admiración mutua. En ese año, García Márquez, con 40 calendarios, publicó "Cien años de soledad", que inmediatamente se disparó en ventas, y el Sartrecillo valiente, con 31 calendarios, ganó el premio Rómulo Gallegos por su segunda novela, "La casa verde". Ambos narradores se presentaron ante un auditorio que albergó a 250 personas. Para consuelo de los que no pudieron ingresar a la charla, en los pasillos del campus universitario se colocaron unos parlantes que transmitían lo que sucedía adentro del salón. Los números le fallaron a los matemáticos de la UNI.

En aquella tertulia el autor de "Relato de un náufrago" dijo que Julio Cortázar era un ejemplo a seguir para los escritores latinoamericano y que, en cambio, Jorge Luis Borges era una literatura de "pura evasión". Al otro rincón, el autor de "La ciudad y los perros" no se cansaba de elogiar a la novela cumbre de su compinche: "‘Cien años de soledad’ va a quedar, puede ser que haya largos periodos en los que se olviden de ella, pero en algún momento esa obra resucitará y volverá a tener la vida que los lectores dan a un libro literario". Las constantes reediciones de ese título clásico parecen haberle dado la razón a Vargas Llosa, quien fungió de entrevistador aquella vez pero que, ante las apreciaciones de su acompañante, él también aprovechaba en disertar sobre la situación del escritor en esa época.

El investigador literario Luis Rodríguez Pastor es el responsable de la reedición de "Dos soledades. Un diálogo sobre la novela en América Latina", que es prologado por el escritor colombiano Juan Gabriel Vásquez y que conserva el viejo prólogo que escribió Oviedo para la primera transcripción de la conversación. El libro, además, incluye los testimonios de Abelardo Sánchez León, Abelardo Oquendo y Ricardo González Vigil, quienes presenciaron el encuentro; las dos entrevistas que Gabo concedió a Carlos Ortega y a Alfonso La Torre; un texto del premio nobel peruano y otro del editor sobre la única visita del hijo del telegrafista de Aracataca al Perú. La yapa para el deleite del lector: Rodríguez Pastor le inyecta algunas fotografías inéditas del evento. No hay pierde.

El relanzamiento de "García Márquez: Historia de un deicidio" y "Dos soledades. Un diálogo de la novela en América Latina", quizá, motivará a quienes tienen las réplicas malhechas y las fotocopias de esos dos libros míticos a desecharlas. Aunque Vargas Llosa y García Márquez no llegaron a escribir un libro "a cuatro manos" como acordaron en varias correspondencias, esas dos obras reeditadas son el mejor testimonio transcrito, hablado y viviente de dos deicidas que, como novelistas, inmortalizaron la literatura latinoamericana en otros continentes.

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Redactor de cultura en EL PERFIL.