Diversas organizaciones sociales y colectivos juveniles, que marcharon contra la usurpación de Manuel Merino, saldrán a las calles este 22 de mayo para decirle "no" a la candidatura de Keiko Fujimori porque esta aspirante presidencial representa la corrupción y el autoritarismo.
Uno de los voceros de la campaña Keiko No Va, Gabriel Salazar, informó que esta marcha nacional tendrá eco en diversas plazas de todas las regiones del país y que los jóvenes del bicentenario, llamados así porque hicieron retroceder a Merino, estarán presentes en la jornada nacional contra Keiko.
Salazar dijo que el peligro mayor para la democracia es que Keiko llegue al poder y explicó que ella no ha cambiado como dice, porque hace poco sostuvo que las esterilizaciones forzadas eran un "plan de planificación familiar".
Manifestó también que el equipo técnico de Keiko está integrado por personajes vinculados a la dictadura de la década de los 90 como Jorge Baca Campodónico, Carmen Lozada, Martha Moyano y muchos otros.
En Cusco, Huaraz, Arequipa y otras regiones, Keiko fue repudiada por nutridos grupos de ciudadanos. La prensa, la televisión que usa señal del Estado, no puso énfasis en estos temas. En aquellas regiones muchos colectivos se organizan para manifestar este 22 de mayo a pocos días de la segunda vuelta.
"Los jóvenes que han marchado por defender la democracia saldrán a frenar al fujimorismo. Pero no solo ellos, la convocatoria es a todos quienes han peleado contra el fujimorismo desde los 90. Estoy seguro de que será una marcha muy amplia, con jóvenes, trabajadores, mujeres, y muchos más", dijo Salazar.
También sostuvo que se están organizando de manera espontánea manifestaciones y plantones contra Keiko en muchos distritos. "Creo que el 22 será un día central de la lucha contra Keiko que se viene dando desde que, de manera muy extraña, pasó a la segunda vuelta, pero habrá más acciones contundentes", indicó.
Los jóvenes plantean también que Keiko no debe volver a gobernar porque entienden que fue parte importante de la dictadura de los 90 y que ya tuvo su oportunidad en el 2016, cuando controlaba el Congreso con 73 parlamentarios.