Por: Antonio Castillo
El fiscal de la Nación, Pedro Chávarry, otrora exsecretario de Blanca Nélida Colán (fiscal títere de Montesinos), fue elegido en su momento solo por 3 votos contra dos en la Junta de Fiscales Supremos: su propio voto, el de Tomás Aladino Gálvez Villegas y Raúl Rodríguez Monteza, ambos ligados al prófugo César Hinostroza. El primero le pedía favores para absolver a un procesado, y el segundo por hacer coordinaciones para lograr la presidencia de la Asociación Nacional de Magistrados.
Los denominados “audios de la vergüenza” revelan que este apoyo se habría originado en reuniones previas, de “cuellos blancos”, realizadas entre el mismo Pedro Chávarry y César Hinostroza, en la casa del empresario Antonio Camayo, ubicada en San Isidro. Este último es también el que coordinaba las reuniones entre Hinostroza y la “Señora K”.
LEE ESTE ARTÍCULO COMPLETO EN NUESTRA EDICIÓN IMPRESA