Tras el fallo que anuló el indulto al ex dictador, Alberto Fujimori, un grupo de simpatizantes llegó este miércoles por la tarde hasta su domicilio en La Molina para manifestarle su "apoyo".
Sin embargo, entre la portátil se encontraban dos trabajadores del Congreso de la República quienes, en horario laboral, dejaron sus actividades para acudir al lugar, según informó La República.
Los personajes en cuestión son Marco Quispe Pacheco, trabajador de la Oficina de Participación, Proyección y Enlace con el Ciudadano, que goza de un sueldo de S./ 4.590, según el portal del Congreso.
Rosángela Barbarán Reyes, miembro del Área de Participación, Atención y Educación Ciudadana y con un sueldo de S/. 4.483, fue otra trabajadora que acudió a la vivienda de Fujimori argumentando que es parte de Fuerza Popular y pidió permiso para asistir sin goze de haber.