La Seminci de Valladolid (España), más allá de ser un festival de cine, es una plataforma para la innovación y la diversidad cinematográfica. Valladolid se transforma cada año en la capital del cine independiente, acogiendo a cineastas de todo el mundo que buscan un espacio para mostrar sus obras más personales y arriesgadas. Los Cines Broadway, un referente cultural de la ciudad, son el escenario perfecto para esta celebración del cine de autor..
Paco Heras es una figura inconfundible en el panorama cultural de Valladolid y Salamanca. Como gerente y propietario de tres cines emblemáticos – Broadway y Manhattan en Valladolid, y Van Dyck en Salamanca – Paco ha forjado su camino en el cine independiente, apostando por una oferta cinematográfica distinta y enriquecedora. En una época donde el cine parece enfrentar la competencia feroz de las plataformas de streaming y las grandes cadenas de multicines, Paco defiende a capa y espada el valor de la experiencia cinematográfica en sala.
Los Cines Broadway tienen un papel destacado en la Seminci “Es un espacio donde conviven la ópera, la danza, conciertos y, sobre todo, el cine, con un ambiente que va más allá de la mera proyección en pantalla”, explica Paco. Este entorno incluye una cafetería, una galería de arte y hasta un piano, creando un espacio cultural integral que difícilmente se encuentra en las grandes cadenas comerciales.
La diferenciación frente a las grandes cadenas
A diferencia de los grandes multicines, que suelen estar ubicados en centros comerciales y dominan el mercado con títulos de gran popularidad, los cines de Paco Heras buscan otra propuesta. En Broadway y Manhattan, se proyecta cine en versión original, cine de autor y películas subtituladas en sus lenguas originales, desde cine europeo hasta documentales y cine independiente. Esta programación diversa busca atraer a un público que valora el cine más allá del entretenimiento inmediato. “Para mí es fundamental que las diferentes culturas y edades puedan compartir el mismo espacio, ya sea alguien que viene a ver ópera o un joven que viene por una película de Disney”, dice Paco.
Desafíos y estrategias post-COVID
La pandemia trajo un golpe fuerte a los cines, y la recuperación ha sido lenta. Según Paco, aunque se está retomando la actividad, los niveles de asistencia no han alcanzado los de antes de la pandemia. El público ha cambiado sus hábitos y cada vez más personas optan por ver películas en casa. Sin embargo, Paco sigue optimista y confía en que la experiencia en sala no tiene comparación: “El cine nunca va a morir. Las plataformas no pueden ofrecer lo que sucede en una sala de cine, donde el espectador se sumerge en la historia de una forma que en casa es imposible”.
Para recuperar al público, Paco ha implementado estrategias de marketing creativas, como precios reducidos en sesiones tardías, descuentos para mayores de 65 años y eventos especiales. Además, organiza cineclubs, proyecciones en colaboración con colegios y hasta sesiones en idiomas específicos, como cine francés con coloquios en el mismo idioma, para atraer a la comunidad educativa y fomentar el interés en el cine en nuevas generaciones. Estos eventos, organizados casi de manera artesanal, logran mantener viva la conexión entre el cine y su público.
Un espacio para el cine latinoamericano y de otros países
Paco Heras muestra un especial interés en proyectar cine latinoamericano, con el que ha establecido una relación especial como exhibidor. Aunque en ocasiones es complicado gestionar colaboraciones con algunas industrias de cine extranjero, el Broadway y el Manhattan acogen cada vez más proyecciones de películas de América Latina, así como cine de India y de otras culturas menos representadas en el circuito comercial.
“Es importante que el público tenga acceso a diferentes realidades culturales”, comenta Paco, y para ello establece alianzas con instituciones como la Casa de la India y el Instituto Hispano-Germánico para realizar ciclos de cine temáticos. Estos programas se ven complementados con coloquios y actividades paralelas que enriquecen la experiencia del espectador.
El futuro de los cines independientes
Para Paco, el cine tiene futuro, aunque también depende de que los gobiernos apoyen el cine nacional e independiente, como sucede en Francia, donde el 10.7% de toda la taquilla se destina a la producción de cine local. “En España, el cine nacional se mantiene a flote gracias a festivales y esfuerzos individuales, pero falta una estructura sólida de apoyo, especialmente para las salas independientes”, comenta.
El enfoque de Paco Heras es apasionado y personal: su labor no se limita a programar películas, sino a crear experiencias culturales completas, donde cada espectador sienta que participa en algo único. Con más ilusión que nunca, Paco concluye que su trabajo y el de su equipo es lograr que “la gente vea que el cine en sala es una experiencia insustituible”.