El próximo 3 de octubre de 2018 se cumplen 50 años de cuando las Fuerzas Armadas iniciaron un amplio y profundo proceso de transformación de las estructuras económicas y sociales.
Fueron cambios radicales: nacionalización del petróleo, de las minas, las aguas y los recursos naturales; reforma agraria; cogestión y copropiedad de obreros y empresarios en las industrias; alfabetización; reforma educativa; socialización de la prensa; autogestión como modelo prioritario de la economía; plena independencia diplomática en las relaciones del Perú con todo el mundo. Y un proyecto de participación popular y renovación de la democracia que no llegó a realizarse.
Una generación de jefes militares, técnicos y políticos civiles protagonizaron este proceso y renovaron las ideas existentes.
Amplios sectores populares acompañaron las reformas. Hubo una resistencia sorda del Apra, y la oposición abierta de industriales, terratenientes y ganaderos; y de un sector de la izquierda que no llegó a comprender la complejidad y trascendencia del proceso. Al producirse la crisis petrolera internacional y el sangriento golpe de Pinochet el 11 de setiembre de 1973, el proceso quedó aislado y se deterioró con la enfermedad de Velasco.
Hasta hoy, la figura de Velasco es ampliamente discutida. Su nombre es repudiado o silenciado por la derecha, mientras que en el pueblo son numerosos los grupos y sectores que lo recuerdan. En el conjunto de la juventud hay grupos que lo investigan con gran interés.
En Comas y otros barrios se preparan homenajes. La Confederación Nacional Agraria realizará un acto el 3 de octubre a las 11 de la mañana. Y el Acto Central tendrá lugar en el local del Sindicato de Trabajadores de Telefónica del Perú Avenida Uruguay 335, el 3 de octubre en la tarde.