El Movimiento Nuevo Perú tiene apenas 5 años de existencia. Es una organización que ha puesto todas sus fuerzas y esperanzas en la figura de Verónika Mendoza, quien empieza su participación política partidaria en Francia, cuando aún era estudiante, y hace un papel extraordinario en las elecciones del 2016 y pierde el norte electoral en el 2021. Luego, trata de ayudar a un Castillo, cuya obra principal es hasta ahora el haber impedido que Keiko llegue al poder.
Sin partido propio, Verónika Mendoza, en las lides electorales del 2016 y el 2021, integra frentes, y trabaja siempre por el partido propio. Sin embargo, a pesar del esfuerzo, no logra, ante el Jurado Nacional de Elecciones, el reconocimiento del movimiento Nuevo Perú como partido político. Por esta razón, da un paso al costado para que haya renovación de cuadros en la organización política.
Verónika Mendoza ha anunciado que no postulará a ningún cargo en la elección de la nueva comisión política de Nuevo Perú, que se realizará este 30 de enero. Este 30 de enero acaba también su cargo de presidenta de la organización.
Hay militantes que han aplaudido la renovación y otros que han pedido incluso mediante cartas que no deje la presidencia de Nuevo Perú. Pero, todo indica, que la decisión está tomada.
El movimiento Nuevo Perú tiene el reto de demostrar ahora que estos cinco años han sido de aprendizaje para fortalecer su capacidad organizativa a fin de seguir creciendo y convertirse en la organización que sea capaz de cambiar la Constitución fujimorista.